Diputada propone crear perfil epidemiológico del alcoholismo femenino
Más de 14 mil mujeres acudieron a centros de recuperación en 2013.
La secretaria de la Comisión de Desarrollo Social en San Lázaro, Francisca Elena Corrales Corrales, propuso exhortar a la Secretaría de Salud (SSA) para que desarrolle un proyecto de investigación multidisciplinaria sobre el perfil epidemiológico del alcoholismo femenino.
Luego de alertar sobre el aumento en el consumo de alcohol entre las mujeres, que pasó de 18.5% en 2006, a 41.3% en 2012, la priista consideró que dicho proyecto tendría que llevarse a cabo en coordinación con los institutos Nacional de las Mujeres (Inmujeres) y Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Informó que de acuerdo con la Dirección General Adjunta de Políticas y Programas contra las Adicciones del Centro Nacional para la Prevención y el Control de las Adicciones (Cenadic), en 2013 más de 14 mil mujeres acudieron a los grupos de Alcohólicos Anónimos (AA) en el país.
Corrales consideró que el estudio que propone serviría de base para implementar políticas públicas con perspectiva de género para su adecuada y eficaz prevención, y en su caso, diagnóstico y tratamiento.
Las mujeres que bebieron de manera diaria, semanal, mensual u ocasional aumentaron casi 23 puntos porcentuales de 2006 a 2012, en tanto que el porcentaje en los hombres se amplió de 53.1 a 67.8% en el mismo periodo.
El Inmujeres puntualizó que si bien el uso de alcohol es más frecuente entre los varones, se ha detectado que las mujeres que lo consumen presentan daños en la salud en menor tiempo que ellos, lo que se sustenta en estudios científicos que muestran que ellas se intoxican más pronto y con una dosis menor, indicó la diputada.
Corrales Corrales enfatizó que el aumento en el consumo de las bebidas alcohólicas en mujeres se expresa también en el contexto jurídico-social y mencionó como ejemplo el Centro de Sanciones Administrativas e Integración Social, “el Torito”, que tuvo que construir un área especial para mujeres.
Destacó que el abuso en el consumo de alcohol en las mujeres genera una condición de vulnerabilidad en la que corren importantes riesgos de ser víctimas de violencia o de participar en relaciones sexuales sin protección.